Mamá
Dime, hijo.
¿Qué se hace antes de una tormenta?
Coger el paraguas, cariño, coger el paraguas.
¿y cómo sabes cuando habrá una?
Sólo tienes que mirar si el cielo está lleno de nubes.
Pero yo no quiero tormentas, me gusta el sol que hay hoy.
No se puede hacer nada en contra del tiempo.
¿Por qué no?
Porque no está en nuestra mano.
¿Y en cual está?
-Mirando al cielo- en la de Dios.
Pero si llueve y ya estás en la calle ¿qué haces?
Puedes correr y ponerte debajo de algún techo.
¡Te mojarás igual!
Ea ¿qué le vamos a hacer?
Entonces ¿no pasa nada si te mojas?
No, cariño. Claro que no. La verdad es que sólo es agua.
Entonces ¿por qué se cogen los paraguas?
Porque a nadie le gusta mojarse.
Mamá...
Dime, hijo.
¿Existe alguien que no se haya mojado nunca?
Pero ¿a qué viene tanta pregunta, petardo?¿Es qué tienes miedo de mojarte?
No...
Mira, cariño, no pongas esa carita. Alguna vez te tienes que mojar, ya verás como no es tan malo.
...
6 comentarios:
No hay comentario inteligente posible para esto.Esto ya se responde todo y se cierra a la opinión.
Quien quiera sacudirse el agua que ya le ha caído también estará en su derecho¿no?.
¿cerrado?
Ja! El cuento sigue donde cada uno quiera.
Veo que lo sigues ^^
(Tendré que acabarlo con puntos suspensivos).
Por eso yo siempre mantengo,corto y sigo,malamente con puntos suspensivos...me da miedo callarme,no sea que le coja el gusto y me calle definitivamente...
El pobre niño sólo tiene miedo de enfrentarse a su primera tormenta...
Quizá si le explicasen lo bien que se siente uno cuando llega a casa y se cobija bajo una manta enfrente de la chimenea estaría más tranquilo =)
hola!
tiene simpatía y alegría este blog y eso me encanta :) eres...nose exactamente quien eres pero me imagino...
al caso, que si llueve no hace falta cobijarse en casa aunque no está del todo mal, está bien disfrutar de algunas de esas gotitas que caen de vez en cuando,no?
bueno, mientras quieras quédate bajo el paraguas, os espero bajo la lluevia tras la huída del sol...*
Todos somos niños y todos los días vemos venir tormentas...
Y si uno tiene donde volver tras la tormenta se verá capaz de enfrentarse a ella.
Soñamos las tormentas antes de que vengan,pero si el pesimismo nos oprimer,no habrá arma que podamos levantar...
Si el viento sopla lo bastante fuerte,puede apartar las amadas u odidadas nubes,y deshacer la tormenta,y si el héroe vuelve a ser piedra,no habrá tormenta que lo dañe...
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